Dos hombres mataron a 11 personas durante una festividad judía en una playa de Australia
Dos hombres mataron a tiros a once personas este domingo en Bondi Beach, en Sídney, una de las playas más populares de Australia, durante una celebración de la festividad judía de Janucá, un ataque calificado de "terrorista" y "antisemita" por las autoridades.
Los servicios de emergencias trasladaron a 29 heridos a los hospitales de la zona, informó la policía de Nueva Gales del Sur.
Uno de los sospechosos del ataque murió y el segundo está en estado crítico, agregó la policía.
El primer ministro australiano, Anthony Albanese, declaró en un discurso televisado que fue "un ataque dirigido contra los judíos australianos", en el primer día de la fiesta de Janucá, una festividad conocida como la Fiesta de las Luces, que el dirigente dijo que debería ser "un día de alegría, una celebración de la fe".
"Un acto de maldad, antisemitismo y terrorismo que ha golpeado el corazón de nuestra nación", añadió, calificando de "héroes" a los ciudadanos que se enfrentaron a uno de los tiradores y lo desarmaron.
La policía calificó el tiroteo como un "incidente terrorista" y dijo haber encontrado "artefactos explosivos improvisados" en un vehículo cerca de la playa vinculado al "delincuente fallecido".
El tiroteo tuvo lugar durante un evento llamado 'Chanukah by the Sea' con motivo de la festividad judía de Janucá, en el que participaban cerca de 1.000 personas, informó la policía.
"Escuchamos los disparos. Fue impactante; se sintió como diez minutos de solo 'bang, bang, bang'. Parecía un arma potente", dijo a AFP Camilo Díaz, un estudiante chileno de 25 años que estaba en el lugar.
- "Sangre por todas partes" -
El presidente israelí, Isaac Herzog, condenó un "ataque cruel contra los judíos" y el primer ministro, Benjamin Netanyahu, acusó al gobierno de Australia de haber "echado leña al fuego del antisemitismo" por haber reconocido al Estado palestino.
El secretario de Estado, Marco Rubio, condenó el ataque y afirmó que "el antisemitismo no tiene cabida en este mundo".
En Reino Unido, el rey Carlos III declaró que está "consternado" y calificó la tragedia como "un espantoso ataque terrorista antisemita" y el jefe del Gobierno de España, Pedro Sánchez, llamó a "trabajar sin descanso para erradicar el antisemitismo y el terrorismo", en un mensaje en X en inglés.
Bondi Beach, en el este de Sídney, es una de las playas más populares del país y atrae a numerosos bañistas especialmente los fines de semana.
Los servicios de emergencia recibieron las primeras llamadas hacia las 18H47 (07H47 GMT), dijo la policía.
La colina cubierta de césped que da acceso a Bondi Beach estaba llena de objetos abandonados por personas que huyeron, incluyendo un cochecito de bebé, indicó un periodista de AFP en el lugar.
El personal sanitario atendió a varias personas tiradas en el césped junto a la playa, según imágenes de la cadena pública ABC. Junto a un árbol en la zona yacía un arma que parecía ser una escopeta.
Harry Wilson, un residente de 30 años, declaró al Sydney Morning Herald que vio "al menos diez personas en el suelo y sangre por todas partes".
- Irán condena el ataque -
El jefe de la Asociación Judía de Australia, Robert Gregory, declaró que el tiroteo fue "una tragedia, absolutamente previsible" y denunció que el Gobierno "no tomó las medidas adecuadas para proteger a la comunidad judía".
Tras el ataque de Hamás contra Israel del 7 de octubre de 2023 que desencadenó la guerra en Gaza, Australia ha registrado varios ataques antisemitas.
El gobierno australiano acusó a Irán de estar detrás de ellos y expulsó al embajador.
En octubre de 2024, un incendio destruyó un café kosher en el barrio de Bondi, y en diciembre del mismo año otro fuego provocado afectó a la sinagoga Adass Israel, en Melbourne.
El primer ministro australiano afirmó, citando conclusiones de los servicios de inteligencia, que ambos ataques fueron dirigidos desde Irán. Ninguno de los dos dejó víctimas.
Irán condenó este domingo "el violento ataque en Sídney, Australia" y el portavoz de la cancillería, Esmail Baqeri, declaró que su país rechaza "el terrorismo y el asesinato" de personas dondequiera que se cometan.
Horas después del ataque, la playa quedó desierta. Cerca del lugar, una mujer abrazaba con fuerza a su bebé envuelta en una manta térmica de emergencia y algunos testigos, todavía conmocionados, intentaban asimilar el horror que vivieron.
Un grupo de personas que presenciaron el ataque se congregaron bajo los toldos de los comercios aledaños fumando, mientras otras llamaban a sus familiares preocupados para informarles que estaban bien.
(T.Martin--TAG)